martes, 8 de enero de 2008

Interview, de Steve Buscemi

Sienna Miller hace un papelón en la peli y me volvió tan loca como a Buscemi, a ratos muriéndome por besarla en la boca y a ratos con ganas de darle un par de tortazos por niñata. Gana de calle el duelo interpretativo a Steve Buscemi aunque éste está tan genial como siempre pero asustadizamente viejo y whiskeyzado.

El tête à tête entre los dos mantiene el ritmo y y los diálogos y su escenificación pasan en segundos de crear tensión, provocar risas, desquiciar, provocar y lo que te dejes transmitir.

Lo peor: la excusa burda y mala malísima, con la que llegan a su casa. Tampoco me convenció para nada el final, porque es demasiado obvio. Podían haberle dado un pelín más a la neurona los guionistas...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Buscemi, como buen perdedor que es, se deja ganar a propósito; sabe que Miller es dinamitable y explota a conciencia todas sus posibilidades. Porque ella lleva la mano ganadora. Porque ese papel es un regalo para cualquier actriz. Y estoy de acuerdo en que el descubrimiento de 'Interview' es comprobar que está a la altura; es más, lo borda. Desde ya es alguien a tener en cuenta y a seguir muy de cerca.

Pero creo que hay que recordar que Buscemi dirige (la película, a ella y a sí mismo) y sobre todo que en este caso no todo es el guión; en un tête a tête como éste lo primordial es ser un buen director de actores. Por eso creo que su jugada maestra es potenciar el rol de Miller y dejarse llevar, acompañarla en el desarrollo de su personaje, aún aparentando estar en desventaja. Me suena lo de asustadizamente viejo (¿también lo habré pensado yo?) y pienso que también es inteligentemente provocado.

Coincido otra vez en que la fórmula para llegar al loft no está resuelta. Pero no en que el final sea demasiado obvio ni que se deba a ciertas mermas neuronales de los guionistas. Pero, claro, he de reconocer que a esas alturas estaba atrapado en unas medias de rejilla, ahogándome cual pececillo que suplicaba ser aplastado por los tacones de sus botas...

mar dijo...

Hola anónimo,

me pregunto cómo habrás encontrado este blog.

Me gustó el diálogo sobre las medias de rejilla y los tacones de la película. Me recordó a la tradición china de vendar los pies y convertirlos en objeto de deseo. Una vez más, detrás del erotismo hay una mujer con menos movilidad y más fácil de atrapar. ¿Por qué será?

Anónimo dijo...

Me encanta que Mar se fije en el morbo de algunas mujeres, como Sienna Miller. Ya me entraron ganas de ver la película!!!

Jesús Miguel dijo...

Cuánto anónimo! Y además morbosos! Descubríos!